El perrito de Amanda Seyfried pillado in fraganti
También los perritos de las celebrities tienen sus necesidades fisiológicas, qué caramba. Y también a las celebrities (si son responsables y quieren de verdad a sus mascotas) les toca salir a dar el paseíto de rigor, con un biruji que te pelas o calor o ese día que se te ha hecho tarde y llegas a casa derrengado pero. Pero tu can te mira con esos ojitos y te comunica, con toda ternura, que necesita ir al excusado. Así que a la calle, por supuesto. Como hizo la actriz Amanda Seyfried, produciéndose la casualidad de que pasaba un paparazzi por allí y la cazó mientras su perro evacuaba los friskis del desayuno. No pasa nada. Las celebrities (y sus perros) también son humanas. Amanda dejó a su fiel amigo hacer lo que tenía que hacer y continuó paseo por Manhattan como si nada. Esto... sólo una cosa: en la serie de fotos no vemos que Amanda recoja (con la pertinente bolsita) lo que su perrito dejó sobre la acera. Seguro que se trata de un malentendido y simplemente el fotógrafo optó por no captar el incómodo momento y no hay incivismo alguno en la actitud de Amanda, esa actriz que os sonará de pelis como Los miserables o In time.
Finn, el amorcito de Amanda
El perro de Amanda se llama Finn y la historia de este can y su dueña es una verdadera historia de amor, tal y como se puede comprobar en el perfil que la actriz tiene en Instagram. Finn aparece fotografiado de todas las maneras posibles, con su dueña y sin su dueña, con colegas caninos, en rodajes, en la playa, comiendo, echando un sueñecito... Digna de verse (y de verdad enternecedora) la atención que Amanda presta a su mascota. Un ejemplo a seguir, una maravilla para quienes, como nosotros, adoramos a los animales. ¡Nos cae bien Amanda! (Incluso aunque no recoja la caca del perro de la acera -¡pero que sea la última vez!).
Fotos: Gtres