Kate Moss presume de cuerpo a los 40 años en Formentera

Cuesta reconocerla en un primer momento pero, sí, es Kate Moss en modo playa ON pasando una jornada de lo más placentera con los suyos en Formentera después de un duro año de trabajo. Y es que la que fuera considerada una de las tops de los años 90 (aunque, como suele pasar con varias de nuestras celebs, las hay que mejoran con los años, como los vinos) ha sido vista disfrutando de la isla española en alta mar.
Con un bikini azul y sin gota alguna de maquillaje, Kate disfruta de sus vacaciones de verano cuando ya ha cumplido los 40 años. La modelo, que este año estrenó su traje de baño en el mes de marzo (y no es broma), ha elegido Formentera como destino turístico después de pasar unos días en Ibiza, esa isla adorada por mil y una celebs que este verano nos ha dejado imágenes para la posteridad.
De cumple en cumple
Y es que Kate primero pasó unos días de los más familiares junto a su marido, Jami Hince, y después, se entregó a la fiesta de Ibiza para asistir a uno de los cumpleaños del verano: el del diseñador Riccardo Tisci. Junto a Naomi Campbell, Kim Kardashian o Justin Bieber (estupendo cartel), la top de Reino Unido se lo pasó de muerte. Eso sí, guardando un poco de fuerzas para otra fiesta de cumpleaños, la del 56 aniversario de Madonna, que también contó con la Moss para festejar su gran día.
Fiestas a un lado, este está siendo uno de los veranos más tranquilos de la top que, años atrás, se caracterizaba por ser una de las niñas rebeldes de la moda y protagonizaba polémicas allá donde iba. Sin embargo, la nueva Kate Moss es una orgullosa mamá que, junto a su hija y a su chico, disfruta del mar de Formentera como una turista más.
Una chica con mucha suerte
Pero si famosa ha sido la Moss por sus fiestas, también es conocida por ser una de las tops más cotizadas del momento. Y es que aunque la chica lleva ya varios años encima de las pasarelas, sigue siendo una de las mejores pagadas del mundo.
Según publicaba The Telegraph, Kate se habría embolsado la nada desdeñable cantidad de seis millones de dólares sólo durante el 2013. Ahí es nada. Y todo, a golpe de sesiones de fotografías, pasarelas y otros menesteres propias de una maniquí que, es imagen de marcas como Rimmel o Topshop.
Además, según publicaba recientemente la revista Forbes, la británica es una de las tops con mayor poder económico del momento ya que, su hucha, llegaría a estar llena (a rebosar) con los 69 millones de euros que se estima podría tener la modelo.
No es de extrañar que tanto éxito haya acabado en la recreación de su pecho en una copa de cristal. Sí, como os lo contamos. Resulta que el restaurante Mayfair 34 utilizó las medidas del pecho de Kate para crear una copa con motivo de sus 25 años en el mundo de las pasarelas. Y ella, tan contenta.
Fotos: Gtres