Scott Eastwood, el hijo de Clint
A la saga Cincuenta sombras de Grey tendremos que agradecerle siempre que aquellos que en su día optaron al puesto, aunque no alcancen la gloria con la saga, sí han dado un salto cualitativo en cuota de fama. Es el caso de Scott Eastwood, un bombonazo de 27 años, quien no sólo ha heredado los genes de su padre, el gran Clint Eastwood, sino que los ha mejorado. Scott, has sido nuestro descubrimiento de 2013.
Modelo reconvertido a actor
Está claro que ser hijo de uno de los grandes directores de Hollywood, abre muchas puertas. También lo hace esa sonrisa y ese cuerpazo que se gasta el muchacho. De hecho, antes que actor, el buenorro de Scott recorrió las pasarelas como modelo de Abercrombie, entre otras marcas. Aunque la firma estadounidense siempre se ha caracterizado por los abdominales de sus chicos. Scott cumple este requisito. Ya en 2006 dio el salto a la gran pantalla, de la mano de Papá Eastwood, en Banderas de nuestros padres, tras la cual vinieron otros títulos como Invictus o Gran Torino. En la actualidad, prepara una película bélica sobre la Segunda Guerra Mundial, junto a Brad Pitt y Shia Leboeuf. Duelo de guapos.
Su movimiento estrella: bailar sin camiseta
No lo dice él, ni tampoco nosotros, lo dicen sus amigos... y les creemos. Entre sus aficiones, están las armas, el surf, el boxeo aunque no la política. Y es que Scott no quiere ser un personaje público y prefiere mantenerse alejado de demócratas y republicanos, al contrario que su padre. Pero lo más sorprendente del este joven californiano es que fabrica su propio whisky. Como lo oyes. Lo hace destilando el agua en la finca de su padre. Una vez terminado, lo sirve en Saddle Bar, el negocio que regenta junto a su socio y que visitaremos, sí o sí, la próxima vez que vayamos a Estados Unidos. Scott whisky para todos.
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